Wild girl

Lindsay Lohan está empezando a ser más conocida por su alcoholismo y adicción a las drogas que por su trabajo como actriz y pseudocantante. Han vuelto a detener a la americana por conducir peligrosamente bajo los efectos de las drogas, a pesar de haber dejado hace unos días una clínica de rehabilitación. Esta vez podemos disfrutar de su ficha policial.

Parece que está de moda ser una chica mala en Hollywood. ¡Tiembla, Paris!