31 diciembre 2009

Dios aprieta pero no ahoga

Y sin embargo, los políticos, a veces con más poder que el del título de esta entrada, nos ponen la soga al cuello y meten nuestra cabeza bajo el agua.

Vamos a estrenar el 2010 con subidas en todos los sectores, todas ellas muy por encima del IPC. Ejemplos:
  • Electricidad: 2,6% (para empezar; más adelante volverá a subir).
  • AVE y Cercanías: 4 y 6% respectivamente.
  • Correos: 6,25%.
  • Metro de Madrid: 21,6%, la mayor subida de la historia del transporte subterráneo.
¿Y cuánto ha subido el IPC en el último año? Más o menos un 0,7%, a falta de confirmarse en las próximas semanas. Y lo que no saben los sopabobas de arriba es que no todas las empresas pueden subir el IPC a sus trabajadores. Y menos aquellas que tienen facturas pendientes de cobrar por parte de las administraciones públicas desde hace más de un año.

Nos imponen estas subidas en uno de los peores años de la economía española, con índices de desempleo que buscan registros históricos.

Desde la Comunidad de Madrid argumentan la subida del Metro diciendo que el coste real de un trayecto que asumía el viajero hasta ahora era sólo el 40%. ¿Y el otro 60%? ¿Acaso lo aportaban desde sus poltronas los altos funcionarios? No. Salía de los impuestos de los ciudadanos. ¿Eso significa que gracias a esta subida del transporte público nos van a rebajar otros impuestos? Tampoco.

¿Cómo es posible que no nos hayamos echado a la calle todavía?